Montes de Triano 20 de febrero 2011

Mañana fresca, pero pronto vemos el sol con un cielo azul y nubes blancas espléndido que nos ha acompañado toda la travesía. Nos desplazamos hasta el polideportivo de Retuerto en el Regato para desde allí iniciar la marcha de BTT por los montes de Triano y antes pasar por la Arboleda, localidad de antiguos mineros que poblaban esos montes.
Sólo salir nos adentramos en la vía verde del antiguo ferrocarril minero de Galdames, en tramos cruzamos por debajo de la nueva autovía, nos adentramos en los antiguos túneles que cruzamos gracias a la luz frontal que llevamos y en una parte tenemos que salir para volver al camino tras subir por una fuerte pendiente en el barrio de Durañona de Traparagan. Cruzamos los últimos túneles antes de salir a la carretera de la Reineta. Nos encontramos de frente con el funicular que sube y en ese punto cogemos la pista de la izquierda que nos subirá tras una pendiente bastante larga hasta el monte Mendibil de 565 mts de altitud, donde existe un repetidor que popularmente es llamado el “ piruli”. Cerca está el monte Argalario, autentico balcón de Bizkaia, que en días claros nos dejan disfrutar de maravillosos paisajes como el superpuerto y las altas cimas de Sollube, Oiz y los montes del Duranguesado.
Por una pendiente en tramos peligrosa por las piedras sueltas del camino, bajamos hasta la Arboleda y por encima del campo de golf llegamos hasta el museo minero del collado de Peñas Negras. En el bar tomamos un tentenpie y nos sacamos fotos en su exterior. De frente enfilamos por la ladera del monte de Peñas negras y nos encaminamos por las pistas cubiertas de pinos y eucaliptos, y en muchos tramos embarradas de los montes de Triano, bordeando un gran barranco donde antiguamente se escondían los contrabandistas en los caseríos de esa zona profunda de Euskadi. En el camino nos encontramos numerosos rebaños de vacas monchinas.
Tras superar la parte alta de la pista que lleva a las Peñas Blancas, nos encaminamos hacia abajo con la vista del gran Bilbao al fondo y por una zona de paisajes extraordinarios que nos alegran la vista. Cruzamos los depósitos verdes del collado de Basatxu y por una pista de cemento sinuosa y de fuerte pendiente descendemos a el Regato, donde nos esperan los vehículos , tras haber superado los 42 kms de recorrido.
Etapa clásica del calendario por los montes de las antiguas minas de hierro con impresionantes vistas que se contemplan desde las zonas altas.