Más difícil todavía. Los retos son para superarlos y un kilómetro vertical es un desafío en toda su extensión.
Son carreras muy cortas, explosivas y muy espectaculares que transcurren por la línea más directa desde la base de la montaña a la cota más alta. En este tipo de pruebas se superan desniveles de aproximadamente 1.000 metros en menos de 5 kilómetros de recorrido. Las salidas, normalmente, son cronometradas cada 30 segundos y el orden de salida se establece según el ranking. En los últimos años, por su espectacularidad, el kilómetro vertical se ha convertido en la cita estrella de muchas pruebas montañeras europeas.
El pasado 21 de Junio se celebró en Arrazola la II Anboto kilómetro vertical, iniciando la carrera desde el barrio de Atxondo situado a 228m de altitud y llegando a la cumbre del Anboto situado a 1328m. El descenso, fuera de carrera, por la otra cara del Anboto; bajamos a Zabalaundi para volver hacia Arrazola siguiendo el curso del río Errekaundi. Aprovechando el descenso para “soltar” las piernas y sobre todo para disfrutar del entorno privilegiado: hayas, prados, cumbres rocosas, riachuelos, fauna, etc. Un recorrido corto pero espectacular. Sin olvidar que estamos en el corazón del Parque Natural de Urkiola.
Dentro del club Extrem Zornotza existen deportistas que le encantan los deportes extremos y como, no, acudieron a éste reto.
El ganador tardó 0:38:36 en hacer cumbre, y nuestros representantes Edu Amorebieta 0:56:08, Iurgi Etxeandia 0:44:53, acompañado de su hermano Etor 0:44:48. hicieron más que meritorio papel, en una prueba tan exigente.
Hay que tener buenas piernas y buenos pulmones para ésta hazaña.
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